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Este es el Blog de recetas de Juan Menor. Sed bienvenidos

viernes, 22 de septiembre de 2017

HUEVOS ROTOS CON SETAS




Soy un enamorado de los huevos fritos, especialmente si son de gallina campera, frescos y, sobre todo, si están bien hechos y se acompañan con unas buenas patatas bien fritas en aceite de oliva. 
Reconozco que, desde que hemos incorporado a nuestro recetario casero los “huevos rotos”,  disfruto probando diferentes combinaciones: solos,  con patatas o añadiéndoles otros ingredientes. Con trufa rallada por encima, son sublimes; quedan estupendos con foie, setas, etc.
En esta ocasión, los he hecho con unas setas que, personalmente me parecen exquisitas y que  en Cataluña se llaman “rossinyols” y en el resto de España “rebozuelos” (su nombre  científico es “cantharellus cibarius”,  seta con forma de copa, de color amarillo, no demasiado grande (de 4 a 10 cms.) y de sabor muy agradable. 
Y, “nobleza obliga”, debo reconocer que en esta ocasión ha sido Tere, mi mujer, la que ha hecho los huevos fritos ya que le salen de maravilla. 
INGREDIENTES (para dos personas):
  • 1/2 Kg. De patatas gallegas (para mí son las mejores para freír)
  • 4 huevos frescos
  • 200 gramos de rebozuelos (rossinyols, cantharellus cibarius, ...) o de cualquier seta que os guste
  • Aceite de oliva virgen extra (para freír las patatas y luego los huevos)
ELABORACIÓN

En primer lugar, pelaremos las patatas y las lavaremos en agua fría para, seguidamente, cortarlas en forma de bastones, o tiras. Las pasamos a un plato y las secamos completamente con un papel de cocina.

Mientras pelamos las patatas, ponemos una sartén grande en el fuego con una buena cantidad de aceite de oliva y esperamos hasta que el aceite esté bien caliente, cosa que comprobaremos echando en la sartén una patata y esperando hasta que el aceite alrededor de ella burbujee. En ese momento, añadiremos las patatas a la sartén y freiremos a temperatura media-fuerte (7/10) durante unos 10-12 minutos, hasta que obtengamos unas patatas bien hechas pero que no estén crujientes. En cualquier caso, podéis hacerlas como más os guste. Sacaremos las patatas con una espumadera y las pondremos sobre unas hojas de papel de cocina para que se escurra el exceso de aceite.

Limpiaremos bien las setas de tierra con un pincel, con cuidado de no romperlas. Prepararemos otra sartén a la que echaremos una cucharada sopera de aceite (aprox.) y, cuando esté caliente, añadiremos los rebozuelos, salaremos ligeramente y saltearemos durante 6 o 7 minutos como máximo. Escurriremos el exceso de grasa y de los jugos que hayan soltado y reservaremos.

A nosotros nos gusta freír los huevos en una sartén pequeña que desde siempre hemos tenido en casa, reservada para ese único fin.  Retiraremos aceite del que usamos para hacer las patatas y lo echaremos en nuestra sartén y encenderemos el fuego hasta que esté bien caliente, echaremos los huevos y los freiremos con cuidado de que no se cuaje la yema.

Montaremos el plato, poniendo, en principio, debajo de todo una buena cantidad de patatas que salaremos en ese momento; sobre ellas pondremos las setas y, encima de todo los huevos fritos.Echaremos un poco de sal maldon sobre los huevos y, con una cuchara de madera, romperemos las yemas para que éstas se esparzan sobre todo el conjunto.




Seguro que hay otras formas de hacer estos huevos rotos y, seguro, tambien quedan exquisitos. Pero nosotros los hacemos así y así nos gustan. Os animamos a probarlos.
¡¡¡¡Que aproveche!!!!!

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